ADICCIONES

Hace mucho tiempo venimos contemplando las adicciones como algo asociado solamente a las alteraciones sensoperceptivas o que presenta una alteración de la realidad, además de ser tendencia o consideradas ocasionalmente como ilícitas; Sin embargo, desde el inicio de este nuevo milenio y con mayor auge en los últimos años, venimos presentado cierto aumento de conductas patológicas o no toxicas a nivel cerebral, como los son los juegos, redes sociales, pornografía, compras compulsivas, comida, entre otras.

Pero ¡ojo! No quiero que piensen que son nuevas o que las estoy inventado, por el contrario, pueden llegar a ser igual o incluso más antiguas y nocivas que las que tradicionalmente conocemos; solo que hasta ahora comenzamos a darle sentido, voz y preocupación, al impacto significativo que esta presentando en nuestra sociedad, principalmente, en los adolescentes este fenómeno.

¿QUÉ SON LAS ADICCIONES TOXICAS Y NO TOXICAS?

La literatura sobre las adicciones es bastante diversa y compleja a la vez, pero para que te des una idea del impacto de la adicción a nivel individual como de otras esferas, la conducta adictiva la dividiremos en dos grupos; el primero, las denominadas como toxicas, son aquellas adicciones tradicionales o sustancias psicoactiva, mientras que las no toxicas las comprenderemos como adicciones “psicológicas” o sociales y con aquellas acciones compulsivas que consideramos inofensivas pero que al final terminan siendo emocionantes, placenteras y preocupantes (juego, sexo, compras, videojuegos, etc.).  

En este sentido se entienden las adicciones toxicas como aquellas sustancias psicoactivas (SPA) que pueden ser naturales, sintéticos, legales e/o ilegales, las cuales “actúan sobre el sistema nervioso generando alteraciones en las funciones que regulan pensamientos, emociones y el comportamiento”; mientras que las adicciones no toxicas serán aquellas:

  • en las que una persona establece una relación de dependencia y pérdida de control con determinadas conductas (compras, trabajo, sexo, comer…) o el uso de determinados aparatos tecnológicos (Internet, móvil…) etc, a pesar de los problemas y conflictos que surgen, junto con una pérdida de interés en otras actividades e inquietudes de su vida.

ALTERACIÓN EN LAS ÁREAS DE AJUSTE:

Frente este campo, podemos identificarlo en las diferentes conductas que se comienzan a desarrollar alrededor de buscar minimizar, esconder, naturalizar y hasta en algunos casos llegamos a buscar validar nuestro quehacer porque bien o mal creemos que con esto que se hace no le hacemos daño a nadie y si lastimo, es al mismo consumidor.

Pero esta es la principal mentira del consumidor de sustancias psicoactivas y de quien puede llegar a presentar trastornos de la conducta por la falta de control de impulso, creer que el daño no existe o que es solamente a nivel individual.

Fisiológico: Si bien es cierto que el impacto e intensidad a nivel cerebral es diferente para un consumidor de alcohol, tabaco y heroína que para quien realiza compras compulsivas, sexuales y/o uso de vapeadores, las consecuencias a nivel de reacción de los neurotransmisores en similar en ambos tipos de adicción, pues se presenta un aumento de la producción y liberación de dopamina, exacerbando la sensación de placer, mientras que reduce la serotonina, disminuyendo la regulación emocional y nublando el juicio de bienestar.

Sexual: En el caso de los consumidores de SPA, por ejemplo, se ha podido identificar la conjunción de ambos estímulos de placer (sexo + SPA) justificado desde el aumento de la sensación, necesidad para la interacción hasta incluso como estrategias para la funcionalidad, rendimiento y resistencia. En otros casos, la energía, tiempo, atención, concentración, planeación y demás recursos emocionales, serán orientados hacia la canalización la sensación de placer a través de la satisfacción de impulso de placer y en un aparente desarrollo de la asexualidad pues no considera necesario para sí este componente.

Económico: Frente a esta esfera, la conducta adictiva se puede identificar al momento en el que se comienza con la estipulación de un presupuesto, en el cual se cree que no generará impacto alguno en las finanzas personales y/o familiares. Sin embargo, con el pasar del tiempo, la sensación de bienestar que produce y/o en la frustración por la perdida, se comienza a presentar un aumento progresivo de tal inversión, al punto de generar descuadres económicos y deudas exorbitantes que se salen de control.

Pareja: Frente a este componente viene un aspecto relevante y en algunos casos es hasta curioso. Pero ¿por qué? Pues se debe a que inicialmente llegan a consideran que tienen “permiso” o “derecho” de divertirse un poco pues cumple con la responsabilidad al interior de la misma; es decir, porque ayuden con las tareas del hogar, dediquen tiempo de calidad, sean cariñosos, ejerzan su parentalidad y cumplan acuerdos económicos, creen que da permiso de divertirse, algo que no esta mal, pero el problema surge cuando aparecen las mentiras, irresponsabilidades, incumplimiento de acuerdos y a largo plazo, la conducta adictiva se convierte en la – el titular de la relación y el – la pareja se convierte en el “Otro”, pues pasa a un segundo lugar.  

Familiar: Esta esfera se encuentra relacionado con el componente económico y de pareja, pues si bien van a empezar a desarrollar lo mejor posible su rol al interior de su dinámica familiar, los secretos, mentiras y descuidos entraran a afectar la manera en como te relacionan y como te empiezan a mirar al interior de la familia.

Laboral / Académico: En una primera instancia podrá llegarse a considerar como una estrategia para mejorar el rendimiento, puesto que dirás que te da energía, descanso, impulso y hasta en algunos casos creatividad; pero las mentiras comenzaran a aparecer y el concepto de responsabilidad comenzará a verse afectado al punto en que llegue deserciones y en los casos más preocupantes, el despido de tu contexto laboral/académico.

Social: Esta esfera tiene un aspecto particular, para algunos casos los amigos serán quienes te ofrezcan, apoyen y/o hasta te “patrocinen” para que sigas siendo parte o te relaciones mejor, pero en otros casos serán los primeros a quienes no les guste lo que haces, por lo cual te dirán y tu mism@ te comiences a distanciar, o en otros casos serán ellos quienes se aparten de ti pues no están de acuerdo con lo que estás haciendo.

Si te das cuenta la conducta adictiva es un fenómeno más complejo que el uso de la sustancia, así como llegas a considerar que eres tu quien la controla, pero con lo anterior, te invitamos a reflexionar alrededor del impacto que esta conducta genera al interior tuyo y a tu alrededor. Sin embargo, durante el proceso terapéutico comenzaras a identificar que detona tu conducta, cual es el motivo para usarla como estrategia de afrontamiento, así como la construcción de estrategias para sobrellevar la ansiedad que puede generar en ti esta situación que generar el tratar de minimizar, dejar y/o alejar esta conducta.  

REFERECIAS

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